martes, 23 de diciembre de 2008

DEL DÍA NACIONAL DE LA SALUD...

Si, si no digo que no sea importante; de hecho creo que es lo MAS importante, o talvez debería decir lo UNICO realmente importante. Pero bueno, que yo no me conformo con una frase hecha, y prefiero ser sincera conmigo misma. Y en mi caso, eso se traduce en lo siguiente: “Satanás, ven aquí que hagamos un trato. ¿Cuanto me das por una muñeca , o un tobillo roto?”

Y es que sí, por todos lados oímos lo mismo: “lo importante es que haya salud”. Pues si, será lo importante, pero dejadme, por muy importante que sea, que haga mi trato personal con Satanás, A mí me escayolan un brazo tres semanas, y a cambio me toca el Gordo de Navidad, ¿hace? NO os tiréis encima mío todas las almas sensibles, no es necesario, yo también creo que lo de verdad primordial es tener salud, pero ¡narices!, qué bien me hubieran venido unos cuantos millones! Y si no soy sincera comigo misma, y reconozco que hubiera dado un trocitín de salud por la tranquilidad de saber que voy a vivir tranquila, con quíen lo voy a ser?

Qué verdad debe ser eso de que el dinero no da la felicidad, pero permitidme que yo lo asegure el día que lo tenga, mientras tanto, solo os concedo: “el dinero no da la felicidad….pero ayuda bastante”. Y es que las penas, con pan, siempre son menos, y a muchos no nos queda más que un a rebanadita.

Hasta pronto.

jueves, 11 de diciembre de 2008

De como se estropean los cuerpos...o los ojos que los contemplan!

El día que mi hermana y yo cumplimos los 40, nos mirábamos, incrédulas...No puede ser...No puede ser...¿Cómo ha pasado tan rápido el tiempo?
Bromeamos durante horas, haciendo chistes de cómo a partir de ese momento, de repente, aparecerían por arte de magia arrugas y patas de gallo que horas antes no estaban; durante semanas, nos llamábamos por las mañanas, preguntándonos si seguíamos igual ante el espejo, o si mientras dormíamos se había apoderado de nuestro cuerpo alguna extraña deformidad atribuible a la edad...No, no pasaba nada de eso, y aunque tampoco lo esperábamos, por pura lógica, en el fondo creo que ambas nos alegrábamos de que no hubiese caído sobre nosotras la maldición de las cuatro décadas.
Qué felices nos las pintábamos! Pero un día, zas! Estrella, siempre mucho más esbelta que una servidora, se despertó con un a extraña sensación:tenía algo en el costado que la estaba molestando.
Algo? Al mirarse al espejo se escandalizó y se abalanzó al teléfono. estaba fuera de sí, furibunda.
En plena cintura, ahí, campando a sus anchas, había un michelín!
Si me hubiera pasado a mi, probablemente no hubiera habido tragedia, pero ella, mucho más chiquita que yo, nunca había tenido de "eso".
Qué narices era aquello? Lo sentía como una presencia extraña, como un alien que durante la noche, se hubiera asentado en sus carnes, agarrándose con fuerza.
Estrella, cariño, se llama "lorza". Una preciosa y rotunda lorza se ha encaprichado de ti, te ha cogido aprecio...
A pesar de la "desgracia", seguimos bromeando, seguimos enfrentándonos con valor al espejo cada mañana, aunque ahora, somos tres: Estrella, Leo, y la lorza de Estrella.
Qué dices? Que yo tengo más? Ni hablar! Además , te recuerdo, que aunque sea por poco TÚ ERES MAYOR QUE YO!
Faltaría más!

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Sí, me gusta la navidad, ¿y qué?

Pero vamos a ver...No somos ya mayorcitos para decidir como nos vestimos, lo que comemos y los lugares que frecuentamos? Pues eso, que si así es, también lo somos para decidir qué es lo que añadimos a nuestra lista de "cosas importantes para mí".

En mi lista hay ya muchas cosas, demasiadas, y algunas de ellas, con el tiempo, desaparecen, cosa de los años, supongo. Pero otras permaneces ahí, inalterables y bien plantadas. Otras nuevas se van sumando a mi lista, y es que con el tiempo, uno, o una, modela su forma de pensar . Así son las cosas, cada cual ve la película dependiendo del la butaca en la que está sentado.
Y sí, en mi lista aparece la NAVIDAD, así, en mayúsculas.
NO es que no entienda los planteamientos que me hacen, cuando me dicen que se ha convertido en una celebración puramente comercial, que se ha perdido el verdadero espíritu, que todo es hipocresía y negocio.
ENTIENDO perfectamente todo eso que me contáis, simplemente es que no estoy de acuerdo, o no totalmente de acuerdo.
Para mí sigue siendo mágica, sigo con las mismas costumbres, mi árbol y mi pesebre siguen en el mismo sitio, y mi ilusión por esperar tanto a Papá Noel, como a los Reyes Magos, sigue intacta.
No me molesta ver las mismas pelis en la tele, ni escuchar los mismos villancicos, aún conservo, incluso, la costumbre de felicitar a mis amigos, a riesgo de ver más de una sonrisa burlona.
Es Mi ilusión, y espero mantenerla intacta, si he llegado hasta más allá de los 40 con ella, no tiene porque desaparecer ahora, no quiero que desaparezca.
Así que ya lo sabéis: burlaos, reiros, y miradme con cara de lástima si queréis, pero no me qutéis la ilusión: CREO EN MARY POPPINS Y EN PAPÁ NOEL, ¿algún problema?
Se acabó.

Y esto qué es?


Pensé que sería buena idea esto de tener un blog...Todo el mundo tiene uno...o casi todo el mundo...
Pero ahora, delante de un cuadro en blanco, me pregunto, ¿para qué narices necesito yo un blog?

Igual me sirve de desahogo, pero ¿necesito desahogarme?
Todavía no me falta el aire, aunque a veces creo que no durará mucho ...Debo parecer una cuarentona histérica, y es que seguramente SOY una cuarentona histérica, para qué nos vamos a engañar.

Talvez logre explicar parte de mi vida, y talvez eso sirva de algo.
Y no es que mi vida sea emocionante , ni siquiera interesante, pero ¡qué caray! es mía.

Sí, ahora que releo estas cuatro líneas, estoy segura de ello: Leonor, eres una cuarentona a punto de entrar en la histeria , así que usa tu blog para culpar al mundo de tus males, antes que el mundo te culpe a ti de los suyos.
He dicho.